23 de marzo de 2009

G

Sentada en el mismo café de antes, me busco y la verdad es que no encuentro parecido con la chica que solía ser. Gabriela no me gustaba. Y hoy no me gusta. No era más que un par de cicatrices, lágrimas y piernas abiertas. Rebelde con causa y sin ella. No era yo. Violenta. Escandalosa. Afanada por un poco de atención. No era yo.
No me hables de la niña que fui que a esa ni en fotos la reconozco. No es un recuerdo. No es nada. Nací a los a los 12 años, desde que tengo recuerdo, cuando ella murió. Dormí durante meses y me convertí en esa que no soy yo. Un día abrí los ojos y me dí cuenta de las cicatrices que decoraban mi cuerpo. ¿Qué pasó conmigo?, ¿conmigo?. Con ella.
¿Dónde estoy?. ¿Qué pasó con ellas?. ¿Quien es esta?.

5 de marzo de 2009

Y sin embargo te quiero*


Las analogías han huido por completo. Las palabras se esconden en la billetera vacía.


Soy la que prometió no herirte, la que con besos te juró que no te haría derramar una lágrima más, la que con advertencias y ultimatos logró que no levantes una copa más. Soy la que te quitó los vicios para guardarlos, con las lágrimas, en la billetera vacía y la que seis meses después te los devolvió y con creces. Soy la que no acompaña tus caminatas, la que no roba tus cigarrillos, la que no llena tu cuarto de peras de caramelo, soy la que no está. Soy la que quiso huir.


Soy las sobras de lo que ella dejó. No soy ni la mitad de lo que fui. Limpiaste cada lágrima con tus besos, cada gota de sangre con caricias, cada marca con "te amo"s que te salían tan baratos. Te dejé ir, me creí "curada" y curada te perdí y me perdí contigo. Te pierdes en una cama diferente cada noche y yo lo hago en la misma, en esa en la que peleo por "te amo"s que saben mal.


¿Dónde duermes hoy?. Donde mis manos no pueden llegar, donde no puedo tocarte y perderme en el olor de tu cabello.


"...Siempre es con otra, nunca contigo... Y sin embargo te quiero..."