22 de noviembre de 2008

Vaivén de vacios

El tiempo rueda acelerando el pulso

en mi muñeca marcada por un par de lágrimas y un amor;

el cielo se tiñe con el dorado de los días,

para vestirse luego con las galas de la noche.

La oscuridad llena el espacio que ocupaste,

aunque su bulla deja aún un espacio, un espacio

listo para ser ocupado por quien ya no quiere ocuparlo.

Corazones rotos enlazándose al ritmo de la música,

venas hirviendo con besos que desgarran labios ajenos.

Caricias que persiguen al minutero y no lo logran alcanzar.

Silencio en las palabras y un vaivén de vacíos

que me trenzan el cabello en sus tardes de ocio.

Papeles descoloridos a causa de los rayos,

caen tras la puerta de la cocina y la pila del reloj despertador se acabó.

5 comentarios:

pao dijo...

ohhh que hermosooo pero lo leo en un momento que estoy muy triste asi que s me cae una lagrima...me re pego!

besotes!!!!!

zeta dijo...

Hola, sí, también yo, espero que te sea útil, gracias por la visita, te debo una debo salir, es tarde.

Anónimo dijo...

Cuando no tengas a quien esperar, grita. ahora grita porque esperas y buscas a alguien que luego vendra
A.

Edson "Lobo" Meléndez dijo...

Me gusto mucho tu blog, los textos que aqui nos presentan realmente se pueden sentir como evocaciones propias en las manos de otro.
Me seguire pasando por aqui con frecuencia.
Aprovecho para agradecer tu comentario, y al mismo tiempo para invitarte a mi otro blog, que es al que le dedico mas timepo por ahora, el otro me trae demasiadas de esas evocaciones que me incitan a gritar, y lamentablemente me he quedado afonico.

Exitos.

Atte.
Beto "Lobo" Malatesta

Diana Neves Eguren dijo...

me encantó mal, lon.